Si además aplicamos a este estilo el TQM, el resultado será la satisfacción del cliente y de todos los miembros de la empresa/equipo, basado siempre en la mejora contínua y la búsqueda constante de la óptima calidad en todas las áreas de tu empresa.
Desde tiempos inmemoriales, los equipos han sido grupos de personas con metas u objetivos en común. Los esfuerzos y recursos de un equipo superan exponencialmente a aquellos individuales.
Pero... ¿uno más uno no es dos? No!!!. Uno más uno dinámicamente es superior a dos.
¿Qué proponemos desde Dirección?
Dirección clara orientada a los Resultados
Comprender el Valor de los Clientes
Predicar con el ejemplo y constancia sobre los objetivos
Mejorar la capacidad de las personas y liberar su ingenio y habilidades
Prevención mediante gestión de procesos
Responsabilidad Social Corporativa
Disponer de objetivos comunes identificados desde Dirección
Integridad y cohesión dentro de sus componentes
Creatividad y Dinamismo
Competencia sana y leal
Perseverancia hacia una visión común
Fun Fun & Fun
Cada miembro debe ser comunicativo y resolutivo
Confianza y compenetración entre sus miembros
Clara definición de funciones y Procedimientos
Compromiso de cada miembro
Para identificar a los miembros de tu equipo puedes usar tu propio sentido común, o bien herramientas como el test de Myers-Briggs, que te ayudarán a diferenciar el tipo de personalidad (extrovertida, sensorial, emocional, perceptiva...). No olvides la diversidad de tu equipo (sexo, edad, nacionalidad..), un factor importante para la cohesión del mismo. Ambas son la base para empezar a trabajar con él.
¿¿Mi gestión favorita?? La dirección transformacional, en la que consigues hacer de cada miembro grandes éxitos futuros. Un ejemplo de este tipo de dirección es la aplicada por el técnico deportivo Wenger, de una maestría y visión de futuro únicas.
Con una dirección bien organizada, la calidad total será sólo la consecuencia del trabajo diario.
Cierto es que el TQM "años ha" que los japoneses comenzaron a aplicarlo después de la Segunda Guerra Mundial, y que en los años 80 comenzó su desarrollo en la Europa Occidental, pero actualmente seguimos teniendo la certeza de que la calidad es la llave maestra para reducir costes y mejorar la productividad, convirtiéndose así en un componente crítico para la ventaja competitiva de una empresa.
Ahora.. un regalito.. Pincha aquí Y DISFRUTA!!!
